CLAUSURA TERCERA PROBACIÓN 2023
“Me has seducido, Señor, y me dejé seducir”
Jer 20,7
Con gratitud en el corazón, el día 3 de septiembre, dimos clausura al período de Tercera Probación de este año 2023. Nuestras cuatro Probandistas: Sor Shiela Mae B. Luis, Sor Geralyn L. Masangkay, Sor Joan Api Assandack y Sor Solange Atengia Achengawah, llenas de gozo espiritual regresan a sus comunidades, después de seis meses de formación intensiva, en nuestra casa de Roma.
El compromiso que contraemos con la profesión perpetua es de suma trascendencia en la vida de la Religiosa, pues reafirma definitivamente la consagración a Dios para siempre. Es por ello que las congregaciones religiosas requieren una preparación inmediata para este paso fundamental. Nuestra congregación, en específico, determinó que este período sea de seis meses, después de, al menos, seis años de votos temporales. Las Hermanas junioras a quienes corresponde esta etapa son retiradas de todas las actividades ministeriales para dedicarse al estudio, la oración y el discernimiento serio, en vistas a la emisión de sus votos perpetuos.
Desde el amanecer del día 3 de septiembre, se dejaban reflejar los sentimientos agradecidos por tantos bienes recibidos durante los últimos seis meses: formación específica del Instituto por Madre Soledad Francisco, Directora de la Probación y Sor Adela Quispe, Auxiliar; ejercicios espirituales de mes, cursos sobre la oración, liturgia y los votos de castidad, pobreza y obediencia. Todos estos sentimientos fueron recogidos en la oración matinal, el rezo solemne de Laudes y la solemne Eucaristía, que presidió el Rvdo. Padre Gabriel Robles OAR, y amenizada por el coro de las Hermanas con cantos muy apropiados a la ocasión. En su homilía, Padre Gabriel, se refirió a las lecturas del día que aportaban un matiz especial al ideal de la vida consagrada. La experiencia de Dios del profeta Jeremías que se sintió seducido por Él, nos demuestra que el amor a Dios no nos debe sacar del mundo, antes bien, nos lleva al servicio del pueblo. Este amor y sus exigencias nos pueden producir el desaliento, a Jeremías le pasó, pero la Palabra de Dios es más fuerte, es nuestra garantía para continuar el camino.
El Salmo responsorial armónicamente cantado por Sor Joan y Sor Solange grita a Dios para que apague la sed con su Palabra y dé aliento a nuestras vidas. El apóstol Pablo nos invita a ofrecer nuestros cuerpos como hostia viva. Para ello se requiere de una ascesis “no os ajustéis a este mundo, sino transformaos por la renovación de la mente, para que sepáis discernir lo que es voluntad de Dios, lo bueno, lo que le agrada, lo perfecto”. En el evangelio, ante la increpación de Pedro, Jesús le recuerda su lugar: “Ponte detrás de Mí”, Yo soy el Maestro, tú el discípulo. Pedro no es rechazado, antes bien Jesús conoce su debilidad y si cae, le echará una mano. De ahí la invitación contundente: “El que quiera venirse conmigo, que se niegue a sí mismo, que cargue con su cruz y me siga”. Lo importante no es que pese la cruz, sino que la llevemos como Él quiere.
La comunidad junto a las Madres de la Curia presentes, se unieron para festejar a nuestras Hermanas y ellas por su parte desplegaron su arte para hacer sentir su agradecimiento a todas, comenzando por su formadora, Madre Soledad Francisco. A nuestra Santa Madre Soledad encomendamos a estas jóvenes Hermanas que regresan a sus respectivas comunidades: dos a Bacolod y dos a Zaragoza, para que allí donde las quiere el Señor en estos momentos, puedan sembrar su amor en las Hermanas, en la misión con los enfermos y con cuantos se crucen en su camino. Que toda su vida puedan cantar con el salmista y con todas las que componemos esta pequeña y grande congregación, que:
“Nos ha tocado un lote hermoso y nos encanta nuestra heredad”
( Cfr. Sal 15,7)
